El vapor llenaba el cuarto de baño
el ruido de la regadera ensordecía
intente soportar la temperatura del agua
tú siempre la prefieres muy caliente
Pero hoy no estabas ahí
no estaba tu olor en la bruma blanca
no estabas para abrazarme desde atrás
no lavabas mi cuerpo
El agua y mis manos me acarician
pero sólo tú conoces mis pliegues
mi espalda con marcas de adolescencia
mis temblores del invierno
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2 comentarios:
Cómo se cura este mal?
No sé Fran,
Pero algo que te hace escribir así... al menos crea algo bueno, pero como ya te había dicho, como que no tiene madre eso de que te digan que algo esta muy chido cuando es tu propio dolor lo que lo produce..
Un abrazote...
y ya lo dijo el señor JM... "no hay placer sin dolor, no es amor si no lastima... no hay pasión que no sea riesgo, no hay rosa sin espinas"
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